Nunca hubiera dicho que encontraría a Lille como una ciudad digna de visitar. De una urbe industrial y gris situada en el extremo norte de Francia, frontera con Bélgica, Lille se ha convertido en una bella, animada y joven ciudad universitaria que mezcla el encanto histórico con una energía moderna y cosmopolita.
Es una de estas ciudades de vasta tradición minera e industrial, con mala prensa, pero que ha sabido reinvertarse y regenerarse. Los que venimos de urbes industriales, sabemos el trabajo y esfuerzo que supone toda esta reconversión y esta expansión de Lille se ve con la construcción del Eurotunnel, la instalación de tren de alta velocidad, la impresionante rehabilitación del casco antiguo y la construcción de un distrito financiero.
Pasear y perderte en ella es dejar que los ojos se maravillen de la rica arquitectura barroca o gótica de ladrillo rojo y piedra , mientras saboreo el delicioso gauffre de vainilla de la famosa pastelería @Meert, que visten los antiguos edificios de estilo flamenco.
El casco antiguo, @Vieux-Lille, con su aire acogedor y sofisticado, sus callejuelas adoquinadas como, la Rue de Monnaie, rodeadas de elegantes boutiques, modernas galerías de arte, cafés con terrazas animadas y pastelerías que desprenden aromas de croissants recién horneados y gauffres calientes, te transportan a la bulliciosa y comercial Lille del siglo XVII donde las elegantes mujeres burguesas vestidas con trajes de seda o terciopelo, de tonos oscuros, corsés rígidos y mangas ajustadas hasta el codo, no podían disimular su satisfacción y orgullo después de ponerse al día de los chismes locales y tendencias de moda.
Qué mejor que disfrutar de la muchas, variadas, coquetas y originales tiendas de arte moderno que contrastan en los bajos de los extraordinarios y coloridos edificios que invitan a que las visites para gozar del arte que se respira en Lille. Una antigûa ciudad que ha sabido dar un soplo de aire fresco para convertirse en un baluarte de la cultura alternativa y que sin duda es ejemplo de la transformación de la ciudad donde lo moderno y antiguo han sabido conectar de forma armoniosa.
¡ Gracias Lille por ser ejemplo de superación!